Qué mejor forma que decorar nuestro mueble del salón que con una lámina hecha por nosotros mismos. Es la forma más económica y más emotiva de llenar un espacio vacío que tanto se va a ver.
Solamente es necesario unas nociones básicas de diseño y dejar correr la imaginación para decidir qué frase nos caracteriza y "tocará en la patata" de nuestra pareja cada vez que la lea.
En mi caso, el diseño lo he preparado con Photoshop, pero hay varias webs que permiten preparar un diseño en menos de 10 minutos, eligiendo tipos de letras y fondos. Yo prefiero hacer uso de los conocimientos que he adquirido en los últimos años y practicar con el programa de diseño de imagen más usado a nivel mundial.
El resultado, tras una hora de trabajo, es este:
Los colores los he elegido a juego con mi salón, pero cada uno puede combinarla a su antojo.
Ya en el mueble del salón, con su cuadro blanco, el resultado es el siguiente:
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