Hace unos meses os hablaba de la decoración con vinilos en cualquier estancia de la casa. Hoy quiero concretar más esa entrada y hablar de los vinilos en el dormitorio, para presentaros el mío.
Aquella frase que nos une, una canción que nos recuerda al día que empezamos, aquella poesía que nos envió un día para reconciliarnos, son palabras que están unidas para siempre a nuestra relación, que las tomamos como nuestras ¿Por qué no fijar esas palabras en nuestro dormitorio para que las veamos cada noche al irnos a dormir? Esa es la idea que se nos ocurrió a nosotros y decidimos plasmarla en el cabecero de nuestro dormitorio.
Soy de aquellas cuya adolescencia ha sido marcada por las canciones de Alejandro Sanz. He ido a cada concierto que ha hecho en Madrid, tengo todos sus discos, me se todas las letras de sus canciones. Mi chico no llega a ese nivel, pero también puede considerarse un fan de Alejandro. Canciones como Aquello que me diste, Amiga mía, Si hay dios son para nosotros himnos que amenizan nuestros viajes o fiestas. Nuestra canción por excelencia es Aquello que me diste y aunque el significado de esta no es el de una pareja que perdura, sino de un amor que acaba de romperse y el chico decide no dejar de amar a su ex, elegimos elegir la frase que menos hiciera referencia a este hecho y plasmarla en nuestra pared.
Puedo afirmar que me encanta el photoshop y que paso horas diseñando y retocando fotos. Así que una vez decidida la frase, teníamos que preparar un diseño de imagen para dar unidad a nuestra pared. Elegimos el árbol que vais a ver a continuación para simular que nace de de la cama.
Espero que os guste.
